Tres años nos separan de la fallida proclamación de independencia que se pronunció en la Generalitat de Cataluña, poniendo la guinda al llamado "procés" para que la autonomía se constituyera como un nuevo Estado, miembro de la Unión Europea.
Una decisión unilateral que ha perjudicado exclusivamente a Cataluña en el aspecto económico y, colateralmente, ha beneficiado a la Comunidad de Madrid, haciendo que sea un polo de atracción de capital mucho más atractivo que se ha traducido en más inversión y más empresas.
En las siguientes líneas repasamos cómo han evolucionado las magnitudes económicas más relevantes para ambas autonomías.
Madrid sale reforzada tras el independentismo catalán
Según los datos de Idescat, la economía catalana lideraba el crecimiento español en el cuarto trimestre de 2017, con un crecimiento interanual del 3,8% interanual (la economía española avanzaba un 3,1%.
Esa distancia de siete décimas no se ha vuelto a ver en los siguientes trimestres. De ser un motor del crecimiento económico ha pasado a verse como un vagón de cola. Si en 2019, la economía española creció un 2%, la economía catalana lo hacía en un 1,8%.
La Comunidad de Madrid ha seguido durante estos años en esa posición de liderazgo ya que desde 2015 hasta 2019 nunca ha contabilizado un crecimiento económico por debajo del 3%. De hecho, debido a la falta de empuje de la economía catalana, la Comunidad de Madrid consiguió superarla como primera economía regional del país en 2018 y se consolidó en el ejercicio de 2019.
Podemos encontrar datos curiosos en estos años. Uno de ellos es que el número de sociedades constituidas en la Comunidad de Madrid era inferior a las de Cataluña en el año 2016, 19.924 frente a las 21.769. Pero a partir de 2017 el papel dominante se evaporó. Y no solo eso, Cataluña marcó una tendencia negativa, con menos sociedades constituidas, mientras que la Comunidad de Madrid no ha parado de ganar sociedades constituidas.
El último año de referencia es 2019. En ese año, Cataluña registraba 18.139 sociedades constituidas, una pérdida de 3.630. Mientras que en el mismo período contemplado, la Comunidad de Madrid registraba un incremento de 1.860 hasta 21.784 sociedades registradas.
Si analizamos la Inversión Extranjera Directa (IED), siempre ha beneficiado a la Comunidad de Madrid por el efecto de capitalidad y un marco fiscal atractivo, pero la clave la encontramos en las tendencias de los últimos años. La Comunidad de Madrid en los últimos años ha tenido una clara tendencia ascendente mientras que Cataluña ha ido a menos.
En el año 2016, de los 27.047 millones de euros que entró en España, la Comunidad de Madrid se llevó 12.261 millones de euros, mientras que Cataluña 8.275 millones. En términos de porcentaje, la Comunidad de Madrid concentraba el 45% y Cataluña el 30%.
En 2019, la realidad ha cambiado. Si España atraía 23.008 millones de euros en IED, la Comunidad de Madrid acaparó 14.246 millones de euros, y Cataluña 3.244 millones. En este caso Madrid ha conseguido mejorar sus números tanto en términos absolutos como en términos relativos a costa de Cataluña. Según el porcentaje, la Comunidad de Madrid aglutinó el 62% y Cataluña el 14%. Curiosamente hay una diferencia de algo más de 15 puntos porcentuales en favor de Madrid y en detrimento de Cataluña.
El traslado de sedes ha tenido su importancia para Cataluña. Para ejemplificarlo podemos mencionar la operación Abertis en el año 2018 que implicaba 14.000 millones de euros y se podía anotar Cataluña si no hubiera visto el cambio de sede.