Parece que, hace unos meses, la multinacional suiza, Nestle, estuvo en conversaciones con la estadounidense, Pepsi, hablando de la posibilidad de una compra de la primera sobre la segunda.
Estas conversaciones terminaron con Nestle alegando que les preocupaba los negocios de comidas y bebidas basura, justo el negocio principal de Pepsi, con su Pepsicola y sus galletas saladas.
Nestle, que se autodefine como saludable y nutricional y con el tag: "Good Food, Good Life" (Buena comida, Buena vida), está preocupada de entrar en los negocios de comida y bebida basura. Entendido.
Sabemos que Pepsi tiene negocios como la bebida, Gatorade, y los cereales, Quaker Oats, que podrían considerarse de nutrición. No obstante, ¿cuándo se dió cuenta Nestle de los negocios de Pepsi y, no deberían haberlo analizado antes de entrar en conversaciones?
Con la divulgación de esta información, accediendo a una posible venta, se puede cuestionar que los directivos de Pepsi como inciertos y perdidos en su estrategia.
Nestle queda muy mal con estas noticias. Si esta empresa llama a la puerta de otras en el futuro, los que reciben la llamada deben pensárselo muy bien antes de entrar en conversaciones con la suiza.
Vía | CNN Money & Governance Focus (los dos en inglés)