La historia norteamericana del automóvil ha sido firmada por estas las grandes compañías de Detroit (Ford, General Motors y Chrysler). Los coches de las series americanas con las que soñábamos de pequeños habían sido diseñados por una de estas tres grandes. El coche fantástico, la furgoneta del equipo A, los coches de policía de la loca academia… Todos venían de una de estas tres. Creo que la única excepción es el DeLorean. Nos encontramos una inquietante noticia. Las tres grandes compañías americanas del automóvil a punto de quebrar. ¿Se acabaron los sueños de nuestra infancia? ¿Veremos un mundo dominado por los japoneses y los europeos? ¿Sufrirá la ciudad de Detroit aún más de lo que ya sufre?
Antes de entrar en especulaciones veamos la noticia. Las tres grandes han sufrido una revisión muy a la baja por parte de Standard & Poors, probablemente la agencia de análisis financiero más importante del mundo. Es decir, de dar como quebradas estas empresas a la situación actual hay un trecho.
Si nos vamos a la página de Standard & Poors encontramos una escueta referencia. En esta se dice que las empresas del motor globales van a atravesar dificultades y va a ser un desafío. No obstante añaden que creen que Ford tendrá liquidez para lo que queda de año.
Que las grandes empresas norteamericanas del automóvil lo van a pasar mal no es secreto de estado, no hace falta la opinión de Standard & Poors. El “Credit Crunch” va a hacer que sea más difícil para las empresas obtener financiación y para los consumidores también les va a ser difícil obtener financiación para cambiar de coche (muy pocos coches se pagan a tocateja hoy en día). Esto va a afectar bastante a estas empresas. Además el alto precio del petróleo no encaja demasiado con su modelo de coche, famosos por su alto consumo.
No obstante la eficiencia en el consumo de combustible es algo que llevan tiempo tratando de solucionar. Hace unos meses se empezaron a plantear mejorar la eficiencia de los coches americanos utilizando la tecnología de sus filiales europeas. Porque cuado hablamos de los ineficientes coches americanos y los eficientes europeos , solemos olvidar que marcas como Opel pertenecen a General Motors. Estas empresas saben fabricar coches pequeños, otra cosa es que hasta el momento hayan sido viables comercialmente en los Estados Unidos.