El derrame de la actual crisis financiera agotó la capacidad del mundo para hacer frente a nuevas crisis, es la primera conclusión del sexto informe del Foro Económico Mundial, Global Risks Report 2011, presentado ayer como anticipo a la cumbre de Davos que se inicia el 26 de enero. Otra de las conclusiones señala que la frecuencia y la gravedad de los riesgos para la estabilidad mundial se han intensificado; mientras que la capacidad de los sistemas de gobernanza global para hacer frente a estos problemas se ha perdido.
El mensaje del documento es claro: Los sistemas del siglo XX no están diseñados para gestionar los riesgos del siglo 21 y se requieren nuevos sistemas en red para identificar y abordar los riesgos globales antes de que se conviertan en una crisis global generalizada. Como señala el director general del World Economic Forum, Robert Greenhill:
“La interconexión y la complejidad de las cuestiones significa que las consecuencias no intencionales abundan, y los mecanismos tradicionales de respuesta a esos riesgos simplemente transfieren el riesgo a otros grupos de interés o a partes de la sociedad”.
Las actuales políticas fiscales son insostenibles en la mayoría de las economías industrializadas. A falta de correcciones estructurales de gran alcance, habrá un alto riesgo de incumplimientos soberanos. Por otra parte, los crecientes niveles de comercio ilícito, crimen organizado y corrupción, forman un nexo de riesgo criminal. El año 2009, el valor del comercio ilícito en todo el mundo se estimó en 1,3 billones de dólares, para el 2012 se habrá duplicado. A su vez, los elevados costos que deben asumir las actividades económicas legítimas, debilitan a los Estados y ponen en peligro las oportunidades de desarrollo, manteniendo a los países atrapados en ciclos de pobreza e inestabilidad.
Por otra parte, como la población mundial sigue creciendo, los recursos estarán bajo una presión cada vez mayor en los próximos años, y el mundo se enfrentará a límites estrictos en el uso del agua, la energía y los alimentos. Este desafío obligará también a enfrentar con seriedad el tema del cambio climático, el agotamiento de los recursos y el problema alimentario que amenaza con elevar el precio de los productos básicos durante este 2011.
Imagen | World Economic Forum