Esta hipocresía se resume en que países prohiben compras de sus empresas y fomentan que estas salgan fuera a comprar.
Recordaremos hace poco que el gobierno italiano decidió que el sector de restauración en las estaciones de gasolina eran importantes para el país y que deberían ser protegidos como los campeones nacionales que son.
Esto seguía la estrategia de otros países europeos donde se ven campeones nacionales por ejemplo, en yogures, galletas y aguas minerales, por no hablar de otros sectores. Como en todos estos casos, el gobierno negó que estaba maniobrando para entorpecer el interés de compra que venía desde fuera.
La diferencia en este caso es que el gobierno maniobró en contra de los deseos de los accionistas de su empresa que, no solo habían organizado la operación, pero denunciaron a su propio gobierno en sus tribunales.
Como siempre ocurren en estas cosas, no hay que tocar a los campeones nacionales pero estos pueden salir a comprar cuando quieran.
Ahora, la italiana, Autogrill, está comprando en Reino Unido y no se oye ni pío del gobierno italiano. ¿Oiremos algo del británico? En este caso lo dudo, aunque no en otros.
Vía | Financial Times (en inglés y €) En El Blog Salmón | ¿Ha perdido la cordura Romano Prodi?, Campeón nacional italiano en alimentación y Definición de campeón nacional se extiende