Hace un par de días, la Comisión Europeo (CE) y los líderes europeos se reunieron para impulsar su política energética dentro de sus objetivos Europeos de competitividad, sostenibilidad y seguridad de suministro. Recuerdo que Europa ya ha visto varios años seguidos de amenazas de suministro de energía, especialmente de gas proveniente de Rusia a través de los gasoductos propiedad de la empresa rusa, Gazprom. La reunión europea tenía tres objetivos (PDF):
- Esas interconexiones necesarias para aumentar o diversificar las fuentes de gas para Europa y los necesarios oleoductos y gasoductos.
- Completar los vínculos de la infraestructura dentro de Europa.
- Para el gas, establecer infraestructura que permita el flujo inverso y el almacenaje, para limar las interrupciones del suministro.
Las prioridades de este plan de infraestructura energética pan-europea de inversión en proyectos de electricidad y de gas ya se han establecido y son las siguientes:
- Redes electricas:
- Una red marina en el Mar del Norte que conectará el norte y Europa Central, para transportar energía producida en campos eólicos marinos a mercados en las grandes ciudades y para almacenar electricidad en las plantas hidroeléctricas en los Alpes.
- Interconexiones en el suroeste de Europa para transportar al resto de Europa la electricidad generada de instalaciones eólicas, solares e hidroeléctricas.
- Conexiones entre Europa Central y el sureste de Europa, para aumentar la integración.
- Integración del mercado báltico de energía al resto del sistema europeo.
- Conexiones de gas:
- Corredor del sur para transportar gas directamente desde el Mar Caspio a Europa para diversificar las fuentes de gas.
- Integración del mercado energético báltico y su conexión a Europa Central y al sur de Europa.
- Corredor Norte-Sur en Europa occidental para eliminar los cuellos de botella y para mejor utilizar la energía que se importa.
También hablaron de las necesidades de financiación para todos estos proyectos y han concluido que, para los nuevos proyectos de electricidad, se necesitará 19.000 millones de euros y, para los nuevos proyectos de gas, se necesitará 6.000 millones de euros, todo para antes del 2013.
Dentro de las necesidades futuras de financiación, también se incluyen las necesarias para el mantenimiento y modernización de las infraestructuras existentes, necesidades mayores. Han estimado que, para antes del 2020, necesitarán más de 1.000.000 de millones de euros para las infraestructuras europeas de producción, distribución (necesidades estimadas en 600.000 millones de euros), transmission (necesidades estimadas en 400.000 millones de euros) y almacenaje de electricidad y gas.
De todas estas necesidades, la CE estima que menos de 100.000 millones de euros vendrá del sector privado, es decir, menos del 10% de las necesidades, dejando a los presupuestos de los gobiernos con la obligación de cubrir lo que queda. Más cargas a los presupuestos de los Estados.
La CE está diseñando nuevas formas de generar recursos a través de mecanismos, incluyendo impuestos europeos.
Vía | BBC News (en inglés)
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