El Gobierno y la Ministra de Vivienda, Carme Chacón, han anunciado hoy a bombo y platillo su plan de vivienda para fomentar el alquiler. Y se basa en dos pilares: unas ayudas directas para jóvenes con ingresos bajos y unas desgravaciones fiscales para todo el mundo con ingresos algo más altos. Ambas medidas son compatibles, con lo que los jóvenes con bajos ingresos tendrán unas buenas ayudas para alquilar.
La medida para jóvenes de entre 22 y 30 años es aplicable sólo para los que dispongan de una renta bruta anual menor a 22.000 euros. La ayuda es de 210 euros al mes durante 4 años, más un préstamo de 600 euros para la finanza y un aval del Estado por 6 meses.
La medida para todo el mundo es únicamente aplicable a los que ingresen menos de 24.000 euros netos anuales (¿por qué netos? la cifra bruta es complicada de calcular, pero digamos que 28.000 euros). Los que tengan estas condiciones podrán deducirse la cuota estatal del 10,05% hasta un máximo de 9.015 euros (el equivalente a la deducción que hay por compra de vivienda con financiación ajena).
En definitiva, un plan de ayudas que en mi opinión no va mal encaminado, aunque quizá las cifras son algo bajas. Me explico. Alguien que ingrese 25.000 euros netos al año no podría acceder a estas ayudas. Como lo razonable es no gastar más de un tercio de las rentas netas en la vivienda, podría dedicar 8.333,33 euros al año al alquiler/hipoteca, lo que da aproximadamente 700 euros al mes. Una cifra bastante justa para un alquiler en una gran ciudad (al menos en Madrid) y para una hipoteca ni de lejos.
Por tanto estoy de acuerdo en que las ayudas vayan al alquiler, para no desperdiciar más recursos. Me parecen algo escasas (aunque también creo que es algo arriesgado tirar más alto y que luego el gasto sea superior al estimado). Y creo que ahora quedan dos puntos fundamentales: construir una gran red pública de viviendas destinadas al alquiler (para ahorrarnos la subvención directa a los inquilinos y dársela mediante una vivienda más barata) y agilizar el sistema judicial en impagos de alquileres.
Creo que en lo único que van a estar de acuerdo conmigo los lectores es en la última medida. Así que, por mi, que empiecen las críticas en los comentarios :)
Vía | El País