Normcore es la última palabra que ha saltado en las revistas de moda, como una nueva tendencia al vestir en contra de la moda hipster. Si los hipsters buscan diferenciarse de la masa, aquellos que siguen la moda normcore no buscan sino encajar en la masa.
Muchas marcas de ropa se están lanzando a aprovechar esta tendencia. El mejor exponente ha sido Karl Lagerfeld, el director creativo de Chanel ha lanzado su colección en un supermercado, con modelos adecuados para ir a hacer la compra al mismo. Otros medios de comunicación afirman que normocre no deja de ser una broma elaborada.
¿Qué es normcore?
El término fue creado por un estudio de los cazatendencias K-HOLE de Nueva York y BOX 1824 de San Pablo. Básicamente habla sobre las múltiples personas que han optado por no diferenciarse en su forma de vestir. Existen multitud de tendencias de vestuario, de forma de ser y de consumir. Ante eso tal vez un día queramos ir a un bar de un tipo de tendencia o salir con amigos de otra tendencia. Tal vez hoy os sintamos de un modo y tal vez mañana de otro, como personas complejas que somos. Eso nos implica que lo mejor es ser capaces de encajar en cualquier sitio con un vestuario que no transmita nada.
De hecho se discute si Kate Middleton, Samatha Cameron o el Principe Guillermo son normcore. No es de extrañar que sigan dicha tendencia, les permite pasar más desapercibidos, de modo que ningún grupo se deje de identificar completamente con ellos.
La moda surgió en Nueva York, pero hoy se ha globalizado. Desde Septiembre de 2013 que la palabra apareció, el interés por la misma se ha disparado. No hay más que ver como lo muestra Google Trends.
Por otro lado el concepto creado por los cazatendencias se ha reinterpretado y cambiado. Se ha tomado como un “hay 7.000 millones de personas en el mundo, no merece la pena diferenciarse”. Se trata de un concepto que básicamente dice que como somos uno más, no merece la pena vestir diferente, nunca encontraremos la individualidad.
Los nuevos iconos de la moda normcore se convierten Jerry Seinfeld (y sus apariciones en la serie Seinfeld), Barack Obama (cuando no lleva traje) y Steve Jobs (con el uniforme que llevaba en sus últimos años).Llevan ropa que no destaca en ningún lugar. E incluso se empieza a comentar que tal vez eso se podría acabar pasando a las tendencias de consumo de otros productos. Si se aplicara por ejemplo al café en casa, se arrinconaría la máquina de Nespresso para utilizar un bote de Nescafé.
Normcore y empresas
Las empresas que se van a beneficiar de esta moda son aquellas que fabrican productos anodinos, sin mucha diferenciación. Dentro de las fabricantes de moda que se han convertido en iconos de normcore según publicaciones como el New York Times tendríamos a New Balance, el fabricante de las zapatillas de Steve Jobs. Sus modelos blancos o grises aparecen como iconos del normcore en todas las publicaciones.
También a Hanes, fabricante de ropa norteamericano, cuyas camisetas blancas normales ayudan a pasar desapercibido en la multitud y a su filiar de marca deportiva Champion. También a su competiddor Fruit of the Loom (que pertenece a Berkshire Hatahway, the Warren Buffet). A The Gap que ya está afirmando ser normcore desde siempre y a Zara (Inditex), especialmente por su capacidad de adaptación y por estar presentes en casi cada calle comercial del mundo.
En cambio las marcas de lujo, los fabricantes de productos más diferenciados se podrían resentir. Malas noticias para Desigual, aunque las noticias sobre su negocio parecen decir completamente lo contrario. Igual de malas para todos aquellos que han hecho negocio con la moda hipster.
También queda por ver si la tendencia se va a extender a otros ámbitos, como los automóviles o la comida. Eso podría significar que se dejarían de comprar Minis de BMW y se pasarían a comprar utilitarios normales, de Toyota, Ford o Volkswagen (pero no su New Beetle). En el caso de la comida, las marcas blancas, los productos de toda la vida congelados tienen las de ganar, frente a los fabricantes de hummus, cervezas exóticas o pasteles raros.
Por último hay que tener en cuenta que la moda normcore puede acabar siendo completamente pasajera, y que dicha palabra desaparezca en unos meses tan rápido como ha venido se ha ido. Ha habido otras muchas que han sido simplemente efímeras, aunque esta tal vez tenga más posibilidades de quedarse.
En El Blog Salmón | Loewe, ¿valientes o kamikazes? e Inditex ya es el número uno Más información | GQ y VOGUE