Parece que los empleados no terminan de entender que, un empresario normal cuya empresa cumple con sus obligaciones fiscales con la Agencia Tributaria y con Tesorería General de la Seguridad Social y que frente a un juicio jurídico-empresarial sea una empresa modelo, pueda realizar acciones contrapuestas y algo heterodoxas contra una acción de defensa legítima como las huelgas cuando no cumplen con las medidas mínimas legales.
Las huelgas de trabajadores es un derecho constitucional, reconocido en casi todos los países del mundo gracias al impulso de la Organización Internacional de Trabajadores y las presiones sindicales, pero que deben cumplir ciertas normas en cuanto a su período de suspensión. Hablemos sobre el ejemplo en cuestión que viene al caso, que es el cierre patronal que está viéndose obligado a tener que hacer Arcelor en una de sus fábricas.
Los trabajadores de Arcelor han protestado severamente sobre el cierre temporal de una de los altos hornos de la empresa en Asturias, pero ¿por qué protestan si lo han provocado ellos mismos?. La medida de cerrar dicha fábrica es un cierre patronal en toda regla y que desde luego no debería criticarse desde el punto de vista de los empleados cuando ellos son, con su incumplimiento de la normativa actual sobre los servicios mínimos lo que ha provocado que Arcelor haya llevado a cabo este cierre temporal.
Recordemos que como ocurre en la normativa fiscal, la normativa empresario-laboral también dice que:
"No es causa deducible de culpa el desconocimiento de la norma"
Es decir, los empleados aunque desconocieran este hecho, han llevado su huelga a un punto en el que no cumple las normas legales sobre el dicho derecho, por lo que Arcelor ha actuado de forma legalmente correcta.
Con esta entrada no vengo directamente a criticar la actuación de los trabajadores ni a defender la actitud de la empresario y socios/accionistas, sino a comentar que creo que en muchos momentos es mucho más notorio la falta de justificación e información jurídica que poseen los trabajadores ante este tipo de situaciones.
Es evidente que como comenta la normativa, es culpa propia y nadie debe decirles a los empleados que deben conocer dicha normativa, ellos mismos han de ser responsables de la misma; por lo que no nos sorprendamos ni pongamos el grito en cielo, como han hecho en esta ocasión los trabajadores de Arcelor, cuando ante situaciones desesperadas los empresarios realicen medidas desesperadas, no son medidas ilegales, sólo una oportunidad de defenderse.
Vía | CincoDías En El Blog Salmón | El cierre patronal, una medida controvertida Imagen | amagill