Estamos a final de año y los bancos se apresuran a captar dinero para sus planes de pensiones, casi todos enfocando su mensaje en el ahorro fiscal que conlleva meter dinero ahí (aunque más que un ahorro es diferir el pago de impuestos al futuro).
Pero algunos bancos tienen otro mensaje. Quieren que nos fijemos en las comisiones y anuncian sus planes como los que tienen las más bajas del mercado. ¿Es de verdad importante fijarnos en las comisiones de los planes de pensiones? Vamos a hablar de ello y mucho de lo dicho aplica también a los fondos de inversión.
Comisiones de los planes, porcentaje sobre el capital
Lo primero y más importante es saber cómo aplican las comisiones en los planes de pensiones. Aquí, como en los fondos de inversión, hay dos comisiones, la comisión de depósito y la de gestión. Ambas son anuales sobre el capital que tengamos, así que al final el efecto total es la suma.
Por ejemplo, si tenemos 10.000 euros en un plan de pensiones y tenemos una comisión de depósito del 0,25% y una de gestión del 1,75% el efecto total es el 2% y pagaremos en comisiones 200 euros al año.
Rentabilidad, la clave
Parece que las comisiones son importantes, sobre todo si vamos acumulando capital durante toda nuestra vida laboral. Cuanto menos paguemos en comisiones mejor, es totalmente lógico. Pero falta un elemento y es la rentabilidad.
La rentabilidad de los planes es, en realidad, lo más importante. En esta rentabilidad declarada ya se descuentan las comisiones. Y si elegimos un fondo debería ser por la rentabilidad, que al final es lo que se va a revalorizar nuestro dinero.
Por ejemplo, si tenemos esos 10.000 euros invertidos en un plan de pensiones y lo hacemos en uno con una rentabilidad del 5% en lugar de uno al 3% ganaremos 200 euros más al año y nos da igual que las comisiones hayan sido mayores. Lo importante es que ganamos más. Quizá paguemos más comisiones porque el equipo gestor es mejor y cobra más por eso mismo.
Planes de gestión activa frente a gestión pasiva
Ahora bien, no es tan fácil invertir en un plan de pensiones que de un 5%. Normalmente para obtener rentabilidades interesantes hay que ir a la renta variable y ahí no tenemos garantía de rentabilidad. El banco invierte en varios activos y la revalorización de los mismos dará la rentabilidad futura.
Para hacernos una idea podemos mirar el pasado pero ya se cuidan mucho de poner la coletilla "rentabilidades pasadas no aseguran rentabilidades futuras". Lo que sí podemos hacer es mirar qué tipo de gestión de activos realiza el plan.
Básicamente nos encontramos con dos: gestión activa frente a gestión pasiva. En gestión activa habrá un equipo de gestores que mire las mejores inversiones que realizar. Normalmente este tipo de fondos tiene unas comisiones más altas, ya que el trabajo a realizar es mayor.
La gestión pasiva, en cambio, se limita a replicar un índice (por ejemplo, el IBEX35) y el trabajo es relativamente escaso. Por tanto las comisiones deberían ser menores.
El caso español
Todo esto es teoría claro. Porque si empezamos a mirar fondos de pensiones en España vemos cosas muy curiosas. Primero, no existen apenas diferencias en comisiones de gestión entre los planes de gestión activa o gestión pasiva. De hecho las comisiones de los de gestión pasiva son bastante elevadas si los comparamos con los de otros países.
Segundo, la mayoría de los planes de gestión activa tienen rentabilidades muy malas. De hecho tiene pinta de que usan ese dinero cautivo (no se puede rescatar hasta la jubilación o situaciones especiales) para invertir donde le conviene al banco, no al cliente.
Por tanto, ¿debemos fijarnos en las comisiones a la hora de contratar un plan de pensiones? Yo creo que es más importante fijarse en la rentabilidad, en general. Y si estamos buscando un fondo de gestión pasiva que replique un índice, sí, hay que fijarse en la comisión y elegir el que mejor replique el índice con comisiones más bajas.
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