Según la "Estadística de transmisiones de la propiedad" que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE), la compraventa de viviendas aumentó un 11,1 % en 2015 respecto al año anterior, hasta un total de 354.132 operaciones.
Bastante significativo que sólo el 22 % de las viviendas transmitidas por compraventa en el año 2015 fueran nuevas, frente a un 78 % usadas. El número de operaciones sobre viviendas nuevas disminuyó un 33,7 %, mientras que el de usadas aumentó un 37,2 % respecto a 2014. Como vemos, el mercado segunda mano tira para arriba de la estadística ante el hundimiento del mercado de vivienda nueva.
2015 fue el segundo año consecutivo con este indicador económico al alza. Sin embargo, los datos hay que interpretarlos con la más absoluta cautela. Si lo que analizamos son los datos mensuales, en diciembre se inscribieron en los registros de la propiedad 123.515 fincas, un 0,3 % menos que el mismo mes de 2014. Además, al comparar diciembre con noviembre nos encontramos con una caída del 3,9 %.
En definitiva, el mercado sigue en valores muy bajos intentando levantar cabeza. Que las entidades financieras comiencen a competir en su oferta de hipotecas demuestra que poco a poco el sector comienza a levantar cabeza. Sin embargo, aún es demasiado pronto para hablar de una recuperación del mismo. Más bien yo lo llamaría estancamiento.
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