Viernes 25 de noviembre. Quédense con esa fecha, porque este año va a ser importante para el calendario del consumo. Por no decir quizá la más importante, porque se celebra el Black Friday, el viernes de los descuentos, que realmente se alarga todo el fin de semana y que este 2022 se antoja clave para un comercio que ve cómo la inflación le está impactando por todas partes.
Aunque el mes de octubre la inflación bajó al 7,3%, la tasa más baja en lo que va de año, sigue suponiendo un incremento de precios respecto al mes anterior (que no se le olvide a nadie), lo que retrae el aun mas un consumo que está exhausto de subidas de precios sin control.
Por ello, el Black Friday puede ser el salvavidas de un sector que ya no sabe cómo aguantar acuciado por las subidas del precio de la electricidad, del transporte y de las materias primas. Vaya, una tormenta perfecta.
Ahora bien, ¿será suficiente con el 'viernes negro' para que el comercio salve la cara este 2022?
Black Friday, Navidad y rebajas
El Black Friday inaugura lo que es la triada mágica para el comercio, ya que después empieza seguidamente la campaña navideña y luego las rebajas de invierno. Los meses en los que más se vende, vaya. Y este año van a ser más importantes si cabe.
¿Qué sucede? Que no está el horno para bollos en el bolsillo de los españoles. La subida de precios en básicamente todo se está comiendo la renta disponible de los hogares, que entre pagar hipotecas, electricidad y alimentación apenas tienen disponible para más.
Somos más pobres que hace un año, por lo que puede que este año el Black Friday no sea una fiesta de compras y derroche. Y habrá que ver cómo son las ofertas.
Porque si el consumo baja mucho los precios, al final no va a quedarse apenas con márgenes, por lo que es un 'viernes negro' endiablado, porque los comercios se la juegan con muy poco margen de maniobra y mucho stock por vender.
Lo que está claro es que muchos aprovecharán esas ofertas para hacer sus compras navideñas, por lo que es a ese cliente al que el comercio debe atrapar, con descuentos atractivos y buenas condiciones frente a la competencia, que va a ser feroz.
Por lo tanto, se avecina un Black Friday muy interesante que nos dará un poco el anticipo de lo que se viene: si una recesión suave o más importante de lo que nos vende el Gobierno a pesar de las advertencias de diferentes instituciones y entidades.