La paternidad supone para todo español en activo unas minivacaciones de 48 horas financiadas por la Seguridad Social con el fin de que el nuevo papá tenga tiempo de inscribir a la criatura en el registro civil. En su momento, el PSOE debió pensar que 48 horas no dan para mucho, y en un alarde de generosidad electoral, es decir, de voluntarismo, prometió convertir las 48 horas en 15 días.
Hoy, el ministro Jesús Caldera ha garantizado que el nuevo permiso de paternidad será de "al menos" 7 días, pudiendo llegar a la cifra prometida (15 días) si hay recursos. Porque claro, es que resulta que esto de los 15 días, pues como que sale muy caro ... En concreto, las palabras del ministro han sido: "Ahora debemos estudiar hasta dónde podemos llegar. Ojalá podamos llegar a las dos semanas, pero su coste es muy elevado". Y digo yo, ¿esto no se podía haber previsto antes de prometer nada en un programa electoral? ¿No sabían hacer el cálculo?
¿Tendremos nosotros, el pueblo, los ciudadanos, los votantes, la posibilidad de incumplir con nuestro voto si pensamos que el Gobierno nos resulta muy caro?
Vía | Cinco Días