Parece que cuando se publique el borrador definitivo del Código de Buen Gobierno promovido por Manuel Conthe y emitido por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) fallará en el tema más importante.
Uno de los elementos que salió en el borrador inicial fue la importancia de los consejeros independientes y su papel dentro del consejo. Parece que lo que más miedo dio a las empresas fue la designación de uno de estos consejeros independientes como Vicepresidente. Este tema puso nerviosos a muchos Presidentes de empresas, ya que veían la posibilidad de que su poder fuera cuestionado. Parece que sus presiones para quitar esto de ahí tuvieron éxito y no se verá en el texto final que se espera recibirá hoy la aprobación del Consejo de la CNMV.
La necesidad de que los consejeros independientes tengan poder de decisión, especialmente en algunos temas, es fundamental, y en otros países su margen de maniobra se ha establecido con más claridad, incluso podiendo reunirse en algunos comités solos, especialmente el de auditoria.
Recuerdo hace unos años, cuando el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) tenía dos Presidentes, se dijo que uno de ellos se negó a firmar las cuentas anuales, ya que identificó algunas cuentas bancarias ocultas en el extranjero que no se reflejaban correctamente en las cuentas anuales. Esa negativa forzó el descubrimiento de esas maniobras financieras y resultó en una investigación que finalmente causó la salida del banco de el otro Presidente y de su Consejero Delegado.
Esta clase de poder que, como mínimo, permite obstaculizar actividades podría ser decisivo para frenar algunos de los juegos financieros y actuaciones poco éticas que se han visto en el mundo empresarial, en varias partes del mundo.
Quitando poder a los consejeros independientes interesa a los Presidentes pero perjudica el buen gobierno.
Vía | El País y La Razón En El Blog Salmón | Código de Buen Gobierno - Listado de comentarios y Manuel Conthe o el arte de "regular"