El nivel de gasto público que se ha alcanzado junto con la caida de ingresos que se está generando en las arcas públicas provoca que haya que subir los impuestos. Los elegidos para subir, el impuesto de hidrocarburos y el impuesto sobre las labores del tabaco.
Con uno estoy de acuerdo con que suba, con otro no tanto. Ambas subidas son importantes en donde porcentualmente más se aprieta en el impuesto sobre las labores del tabaco. Los incrementos que se barajan son de 19 céntimos para todas las marcas. El tabaco no es imprescindible para la vida diaria y esta subida se amortigua con el mero hecho de dejar de fumar. Así de simple y sano.
Por cierto, para los que se han pasado al tabo de liar, también vienen malas noticias. Se ha aprobado una subida que equiparará casi el precio de la picadura con la cajetilla. Se acabó el ahorro en tabaco.
Pero la subida en hidrocarburos es otro cantar. El coste de la gasolina se encarecerá 2,9 céntimos por litro tanto de gasolina como de gasóleo. Se salva el gasóleo profesional y uso doméstico. En la gasolina no se puede prescindir y esa subida no tiene razón de ser.
La cuantificación en incremento de recaudación se ha estimado en unos 1.100 millones de euros, que puede parecer mucho pero ese no es el sistema a seguir. Y no es el sistema porque no se dejan de poner parches y cambios sin sentido en nuestro mapa tributario.
¿Os acordáis de los famosos 400 euros? Esa medida propagandística electoral le cuesta a las arcas públicas más de 6.000 millones de euros por ejercicio. No era necesaria ni adecuada, y por ese mismo motivo, se tendría que haber eliminado directamente, en lugar de llevarla a cabo con todas las consecuencias.
Pero claro, también comentan las malas lenguas que la deducción de los 400 euros también se va a suprimir / modificar muy a la baja en breve, con lo cual habremos conseguido calmar el tributo electoral prometido y de paso colar un par de subidas adicionales en el mapa impositivo de impuestos indirectos. Hay que dejar de poner parches recaudatorios y afrontar una reforma fiscal en serio.
Por cierto, dardo para juristas ¿se puede modificar una ley como es la ley de impuestos especiales mediante un decreto-ley?
Vía | Cinco días
Más Información | La Moncloa
Imagen | Sergis Blog
En El Blog Salmón | El reparto de impuestos en el coste de la gasolina