En un reciente estudio del Banco Mundial, titulado ¨Close to Home¨ (estudio en inglés), anunciaron que Latinoamérica recibe remisas de €38.300 al año de distintas partes del mundo. Esta cantidad es equivalente al 70% del capital privado invertido en esa zona, que lo hace una fuente de ingresos muy importante.
Hay dos aspectos interesantes de este informe. El primero es que, dependiendo de qué país los recibe, distintos segmentos de la sociedad se benefician primariamente.
Las remesas que llegan a México, El Salvador y Paraguay, ayudan más a los sectores más pobres de la sociedad. Sin embargo, remesas que llegan a Nicaragua, Perú y Haití, dice el informe, ayudan más a la clase media.
El otro aspecto que resalta el informe es que tanta remesa tiene su aspecto negativo para los países receptores.
Su análisis se basa en el mismo efecto que experimentan los países con muchos recursos naturales y donde la economía depende de los ingresos generados por la exportación de un único producto. Corrupción, control gubernamental, burocracia, manipulación del dinero, y macro comisiones. Todo esto acompañado de la falta de políticas que crean una economía equilibrada que es lo único que ayudaría a los más necesitados.
Hay muchos ejemplos del desastre que experimentan estos países que dependen de ingresos de una solo fuente. Sólo hay que ver, por ejemplo, Venezuela, Nigeria, Iraq, y los países del golfo, todos países con ingresos importantes de una sola fuente y con políticas nefastas para sus pueblos.
Está claro que las remesas están asociadas con niveles de pobreza más bajos, y mayores tasas de crecimiento e inversión pero el efecto que tienen es desigual a través de la región. No obstante, con las cantidades que se mueven, cosas malas también pasan y, como siempre con estas cosas, ¡ganan los corruptos y pierden los pobres!
Vía | BBC Mundo En El Blog Salmón | ¿Se olvida Chavez de los suyos? Más información | Nota de Prensa del Banco Mundial