Los desahucios han sido uno de los grandes dramas de nuestro país en los últimos años, consecuencia inevitable de la crisis acontecida. Sin embargo, según los últimos datos del Consejo General del Poder Judicial, este drama va a menos y poco a poco sus cifras avanzan hacia niveles previos al estallido de la crisis económica.
En concreto, el número de ejecuciones hipotecarias en 2015 se situó en 68.135 casos, lo que supone un 15,6 % menos que el año anterior. No en vano, estamos ante la cifra más baja desde 2008, año en que se produjeron 58.686 ejecuciones.
Estamos, sin duda, ante una buena noticia que muestra que poco a poco la economía española va saliendo del pozo. Sin embargo, es importante destacar que ejecución hipotecaria y desahucio no es lo mismo. El desahucio (o entrega judicial) no afecta a todas las ejecuciones, que además no todas se refieren a vivienda habitual.
En relación a este punto ya en una ocasión os mostramos otra forma de ver los desahucios, separando la paja del grano para no confundir ni malinterpretar intencionadamente las cifras. No obstante, hay que partir de la base de que un sólo desahucio ya es un drama en sí mismo. Por ello, quizás la dación en pago debería ser una cláusula contemplada en todas las hipotecas.
En El Blog Salmón | Otra forma de ver los desahucios