El tema de esta semana, nació la semana pasada, cuando la señora Kirchner decidió llevar a cabo la expropiación de YPF, la filial argentina de Repsol. Las relaciones entre España y Argentina se han tensado.
Desde el otro lado del atlántico nos recuerdan que no es esta la primera estatalización de una empresa con participación española que se produce en Argentina, y que eso no debería hacer desconfiar a las empresas españolas que operan en el país, ya que no se trata de un ataque a las empresas españolas.
También responden a algunas cuestiones sobre como ha sido y como debería haber sido la operación, desde ambos lados del atlántico han aparecido acusaciones y fanatismos que poco o nada tienen que ver con los negocios de la petrolera, entienden que una actuación de este tipo genere cierto recelo a invertir en el país americano.
La reacción de nuestro Gobierno a esta expropiación, también generó corrientes divergentes de opinión sobre si es tarea del gobierno entrar o no a defender los intereses de una empresa privada, aunque parece que el gobierno argentino va más por hacerse con el control total de la compañía, que por actuar contra la filial española.