¿Qué debe pasar cuando un gremio tiene una concesión del Estado y no cumple con las obligaciones detalladas en esa concesión? La respuesta simple es que el gremio debería perder su concesión.
Los estanqueros han manifestado su descontento contra Philip Morris por bajar el precio de su marca, Marlboro, suspendiendo la venta de este producto. Teniendo en cuenta que reciben un porcentaje del 8,5% del precio de venta, cuando el precio baja, sus ingresos también bajan. Ellos estiman que esta bajada de Philip Morris les impactará con una pérdida de sus ingresos de entre €12-15 millones al año, cantidades importantes. Que calladitos estaban cuando los precios, y su tajada, subían. Supongo que antes de que sus concesiones se puedan suspender, se necesitará una investigación de las autoridades pertinentes y se tendrá que analizar sus argumentos y, como parte de eso, veremos las presiones políticas usuales, las salidas a la calle.
Como otros gremios, los estanqueros no se deben olvidar que derechos de monopolio concedidos por el gobierno también conllevan obligaciones a cumplir y parte de esas obligaciones son no meterse en la dinámica del mercado y de cambios de precio.
La decisión de subir los impuestos, que los estanqueros están pidiendo y que les subiría su comisión, o no es del gobierno y los estanqueros no tienen el derecho de presionar ni al gobierno ni a las empresas productoras incumpliendo sus obligaciones. Los clientes que quieren su Marlboro tienen el derecho de poder comprar su producto.
Vía | Expansión, La Razón y Europa Press En El Blog Salmón | Marlboro más barato que Fortuna… ¿estamos locos?