Estos días, Dame Sally Davies, el director médico del Reino Unido, ha comentado a un comité de su parlamento que no tiene ninguna confianza de que los fabricantes de alimientación y de bebidas actúen voluntariamente para reducir el contenido de azucar en sus productos. Al contrario, a pesar de sus declaraciones de buenas intenciones, estas empresas van a necesitar imposiciones gubernamentales para conseguir lo que se busca.
Cuando el presidente de Coca Cola Europa dice "creo que Coca Cola tiene un poco de azúcar en ella" (en la entrevista de la BBC en el primer artículo vinculado), está claro que la transparencia y el cambio no son sus prioridades. Desgraciadamente, Dame Davies dice que quizás tendrán que ir en la dirección de introducir un impuesto sobre la azucar, pero espera no tener que hacerlo. Es decir que todavía no se entera que los fabricantes harán lo mínimo exigido lo más tarde posible y nada más.
Además, contó que el alto y la creciente obesidad resultará, por primera vez, en una generación que sufrirá una reducción de su longevidad.
Sus palabras reflejan las de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que está en medio de una consulta pública sobre el consumo de azúcares. Su objetivo es presentar a los países sus recomendaciones sobre la limitación del consumo de azúcar con el objetivo de reducir los problemas de salud pública provenientes de la obesidad y de la caries dental.
Actualmente, la OMS recomienda limitar el consumo de azúcar de limitarse al 10% del consumo calorífico diario. Se está barajando reducir esta cifra a la mitad, aunque sólo como recomendación condicional, no como recomendación firme.
Como ya he dicho en estas páginas:
Hay mejores y peores formas de recaudar y de reducir gastos y prefiero ver más impuestos sobre la energía, más multas, cobrar más por conducir en las ciudades, cobrar más por conducir vehículos más contaminantes, cobrar más por conducir camiones, cobrar más por aparcar los coches en las ciudades, cobrar más por aparcar mal y por retiradas de vehículos, aumentar el número de carreteras de peaje, y cobrando más, y la reducción de las carreteras libres. Todas son formas que apoyo para recaudar más.
Pues toca un impuesto sobre los productos con azucar que es la mejor forma de regular el consumo y de recaudar fondos para pagar los gastos.
Vía | BBC News y BBC News (los dos en inglés) En El Blog Salmón | Hay que subir los impuestos sobre las bebidas azucaradas y Necesitamos más impuestos sobre los alimentos poco saludables Imagen | 401(K) 2013