Al hilo de las dudas planteadas en varios comentarios de los posts escritos sobre el rescate a Chipre y tras haber recibido algún correo electrónico preguntándome por qué la Unión Europea (UE) exige a Chipre que recaude por sus propios medios 5.800 millones de euros a cambio de recibir los 10.000 millones del rescate, creo que sería conveniente que explicáramos este requisito tan peculiar del rescate a este país que no se ha dado en ninguno de los rescates anteriores.
Empecemos con las cifras absolutas: Chipre necesita 17.000 millones de euros, de los cuales 10.000 millones son para sanear y recapitalizar su maltrecho sistema financiero y los 7.000 millones restantes se destinarían a financiar el déficit público en el que incurriría por su falta de acceso a los mercados. La cifra es insignificante en comparación, por ejemplo, con los 40.000 millones del rescate a España. Entonces, ¿cuál es el problema? Simple, Chipre es un país muy pequeño y su economía lo es aún más. El PIB de este país ronda los 18.000 millones y sólo representa el 0,2 % del PIB total de la UE. Mientras tanto, el rescate que necesita asciende a 17.000 millones, por lo que si se hiciera en su totalidad, la deuda de Chipre se dispararía en torno al 200 % del PIB y lo condenaría a la insolvencia.
Ante esta situación, la propuesta de Bruselas pasa porque una parte de esos 17.000 millones, concretamente 5.800, sean asumidos por el propio país y ha considerado que la fórmula más efectiva para conseguirlo sería imponer un impuesto a los depósitos, lo que se traduciría en que el incremento de la deuda pública chipriota sobre el PIB no sería tan insostenible a medio y largo plazo.
Cabría estudiar una segunda opción para que Chipre ingrese esos 5.800 millones procedentes de la UE sin que le cuenten como deuda. Esta consistiría en que la Eurozona aportara directamente el dinero a los bancos de Chipre como capital pero sin que el Estado de este país tenga que dar garantías. Para esto ya se creó el Mecanismo de Estabilidad Europeo (ESM por sus siglas en inglés) y Rajoy lo negoció para España, pero no se le concedió.
O ya, si me apuráis, ¿por qué no aporta la UE los 5.800 millones a cambio de algo material como los derechos sobre los yacimientos de gas natural de la isla? Al fin y al cabo, es muy probable que Rusia esté negociando una concesión de este tipo.
En El Blog Salmón | Corralito en Chipre