El Instituto Nacional de Estadística (INE) acaba de hacer público que el Producto Interior Bruto (PIB) de la economía española creció un 3,2% en 2016, exactamente el mismo crecimiento que el experimentado en 2015. Los datos publicados hoy son provisionales y no se conocerán a nivel desagregado hasta el próximo 2 de marzo.
Durante el último trimestre del año el PIB creció un 0,7%, también la misma tasa que en el trimestre precedente pero por debajo de la registrada en los dos primeros trimestres del año (0,8%). Se constata de esta forma la leve ralentización de la economía española durante la segunda mitad del año. No obstante, es importante señalar que se acumulan ya trece trimestres de avances.
Por su parte, la tasa interanual se situó en el 3% en el cuarto trimestre de 2016, exactamente dos décimas menos que en el trimestre anterior (3,2%). Esta tasa acumula doce trimestres en positivo, síntoma inequívoco de la mejoría de económica del país tras la terrible recesión económica sufrida hace unos años.
Como explican en El País, la economía española ha hecho bastante músculo en los últimos tres años y el PIB prácticamente ha recuperado el 80% de lo perdido durante la crisis económica. Es decir, tras la recesión sufrida años atrás, el PIB español está ya a niveles de 2008, y creciendo.
No obstante, como comentamos más arriba, los signos de agotamiento de la economía española son evidentes. El ritmo de crecimiento ha sido un poco más moderado en la segunda mitad del año, por lo que solo cabe esperar que en 2017 el crecimiento económico vaya a menos. De hecho, la EPA publicada hace unos días va en la misma dirección que estos datos, pues constata que en 2016 han encontrado empleo un 21% menos de personas que en el año anterior.
¿Acertaron las previsiones económicas?
A toro pasado podemos comprobar que en general los organismos que hicieron previsiones económicas tuvieron muy buena puntería, lo cual no suele ser lo habitual. También es cierto que actualizan sus previsiones constantemente según la marcha de la economía, lo cual hace que pierdan un poco de mérito.
En nuestro país los más acertados fueron el Banco de España, Funcas y el propio Gobierno: ambos estimaron que el PIB crecería un 3,2% en 2016. No obstante, la Oficina Económica de Presidencia estimó hace un par de semanas que el crecimiento podría llegar a ser del 3,3%. También De Guindos se pasó de frenada en una entrevista en la que aseguró que el PIB podría llegar a crecer un 3,5% en 2016.
Mientras tanto, tanto BBVA, a través de BBVA Research, su servicio de estudios económicos, como la Autoridad Fiscal Independiente (Airef), erraron por tan sólo una décima en su previsión: ambas estimaron que la economía española crecería un 3,3% el pasado año.
A nivel internacional, las previsiones sobre la economía española también han sido bastante acertadas, pese a que estos organismos suelen ser por norma un poco más conservadores que los españoles: el FMI, la OCDE y la Comisión Europea clavaron su previsión de crecimiento del 3,2% en 2016.
¿Qué podemos esperar este año?
Si estos organismos vuelven acertar en sus previsiones económicas para este año se constatará la ralentización del crecimiento de nuestra economía. El Banco de España estima que creceremos un 2,5% en 2017, misma cifra que BBVA Research. Funcas cree que el crecimiento será del 2,4% en 2017. FMI y OCDE son más conservadores y dejan su estimación en el 2,3%, misma cifra que maneja el propio Gobierno.
En definitiva, todas las previsiones económicas, vengan del organismo que vengan, apuntan en una misma dirección: la economía española irá a menos a este año, lo que nos obligará a realizar un ajuste importante para cuadrar el déficit público. Por otra parte, no olviden la relación directa entre crecimiento y empleo: a menor crecimiento, menos empleo.
En El Blog Salmón | ¿Cómo van las previsiones sobre España? y Banco de España, FMI y OCDE revisan sus previsiones económicas