La Autoridad de Servicios Financieros (FSA, en inglés) del Reino Unido ha presentado su plan de mayor regulación bancaria para evitar una nueva crisis financiera en el futuro. Con ello se convierte en el primer país en aplicar las normas sugeridas en el G20.
Las medidas son tener mayor capital y mayor liquidez, así como que los activos sean más líquidos. También se limita la máxima financiación a corto plazo para que no sea una causa de problemas financieros.
La normativa, aún sin estar muy detallada, me parece muy positiva. Por supuesto, impedirá que se tomen ciertos riesgos que permiten florecer ciertas iniciativas privadas, ya que la banca se volverá más conservadora por necesidad de la regulación, lo cual es un punto negativo. Pero el mal mayor de nuevas quiebras y rescates que pongan en peligro tantos los ahorros de los depositantes como la estabilidad financiera de los Estados es más importante.
Eso sí, la regulación no entrará en vigor inmediatamente, sino que se esperará a que el temporal pase. Es lógico, si se aplicara ahora, cuando los bancos están siendo mucho más responsables en sus acciones, el crédito se contraería aún más e impactaría fuertemente en la economía "real". Si se introducen cuando la situación de la banca vaya regresando a la normalidad el impacto será menor.
¿Para cuando el resto de países moverán ficha? ¿Tendremos en España también nuevas normativas financieras?
Vía | El Economista Imagen | HowardLake