Hoy me gustaría dedicar esta entrada a uno de los aspectos que considero fundamentales en el trading, y que con toda seguridad fue clave en mis inicios para decidirme a dedicarle todos los esfuerzos necesarios: su escalabilidad.
En efecto, el gran potencial del trading radica en la circunstancia de que uno es capaz de multiplicar sus ingresos sin dedicar ni un minuto más en la operativa. ¿Ves posible a día de hoy duplicar, triplicar o multiplicar por cinco tu sueldo trabajando exactamente las mismas horas que en la actualidad y haciendo exactamente las mismas tareas? Es una pregunta retórica. La respuesta del 90% debería ser no. Con el trading, eso es posible.
No es poca la gente que aterriza en el mundillo del trading atraída fundamentalmente por el dinero. Más allá del dinero, y como un apasionado de la productividad que soy, a mí lo que más me atraía era ese potencial de escalar resultados aplicando el mismo esfuerzo. Yo tenía claro que no me iba a obsesionar en sacar mucho dinero cuanto antes, sino que el verdadero objetivo era sacar lo que fuera, para luego poder ir incrementando posiciones. Buscaba la eficiencia en el trading, no la abundancia.
Resulta curioso como el enfoque de los que afrontan el trading para sacar lo máximo posible cuanto antes acaba resultando en pérdidas en el 95% de los casos, y sin embargo, los que se conforman con ir haciendo poco a poco, suelen tener unos resultados más consistentes en el tiempo, independientemente de la cuantía de los mismos.
El "cuento de la lechera" es muy práctico para explicar la escalabilidad. Es común que un trader que está empezando se marque objetivos de 100 euros diarios en intradía. Una cifra redonda y aparentemente cercana operando futuros, por poner un ejemplo. Creo que es manifiestamente evidente que hacer 100 euros va a ser más complicado que hacer, por ejemplo, 20 euros diarios. Y seguramente, para hacer 100 euros diarios vas a dejarte muchas operaciones perdedoras en el camino, por lo que suponiendo que tu stop loss sea también de 100 euros, seguramente tus operaciones ganadoras deban ser de bastante más de 100 euros.
Sin embargo, si tu planteamiento consiste en lograr hacer 20 euros diarios en un primer momento e ir escalando posiciones, la cosa cambia. Hacer 20 euros es sensiblemente más sencillo. Si logras hacerlo de manera consistente, puede llegar el momento en el que en lugar de operar con 1 contrato, decidas operar con 2. Haciendo exactamente las mismas operaciones que antes (únicamente duplicando el riesgo, por supuesto), vas a ser capaz de obtener 40 euros en lugar de 20. E incluso puede llegar el momento de operar con 5 contratos y obtener con esas operaciones los mismos 100 euros que buscabas con 1 único contrato.
Aunque la realidad de la operativa multicontrato no es exactamente la que describo en este ejemplo. Es una práctica habitual y muy efectiva utilizar los diversos contratos para gestionar la posición durante cada operación. Pero creo que la idea de la escalabilidad queda más que clara, y por eso considero que el trading tiene un potencial extraordinariamente atractivo.