Después de ser capaces de entender el contexto del mercado en base a un buen uso de los gráficos y los indicadores técnicos, llega el momento de introducir en el mercado aquellas operaciones que hemos decidido tomar.
Para posicionarse en el mercado es necesario dominar perfectamente las diversas posibilidades que tenemos de abrir operaciones en función de la plataforma que estemos usando, pero en esencia, todas ellas permiten hacerlo en base a unos mismo principios que vamos a repasar a continuación.
Entrar largo o entrar corto
De entrada, y como ya comentamos cuando explicamos el spread, siempre que queramos entrar al mercado tendremos dos precios a nuestra disposición: el precio bid y el precio ask. El precio al que se nos servirá una orden dependerá de si la posición que queremos tomar es de compra o de venta.
Si nos vamos a poner largos en el mercado, es decir, vamos a comprar el par de divisas que estamos operando, el precio al que se nos servirá será el del ask. Por el contrario, si lo que vamos a hacer es apostar a que la cotización de un para de divisas va a ir a la baja, y por lo tanto nos ponemos cortos, o vendemos, deberemos atender al precio del bid.
La diferencia entre el precio del bid y del ask, conocida como spread, es variable en todo momento y depende en buena parte de la volatilidad del mercado en cada momento puntual. El spread nos va a implicar iniciar una operación siempre con pérdidas, ya que se carga en el mismo momento de entrada al mercado. No deja de ser nuestra comisión por tomar esa operación, así que debe considerarse algo absolutamente normal.
Formas de entrar a mercado
La manera más rápida y directa de entrar al mercado, aunque probablemente también sea la menos empleada, es la denominada “a mercado”. Es decir, es entrar instantáneamente en el mercado al precio que actualmente esté, y se lleva a cabo con el simple click de un botón de compra o venta. En general, y puesto que no es una entrada colocada estratégicamente colocada no es la forma habitual de colocar las operaciones. Eso sí, puede ser interesante conocerla bien, pues sí se usa a menudo para cerrar posiciones.
La forma más habitual de tomar posiciones en el mercado es introduciendo órdenes stop o limit, que son las dos operaciones más usadas en Forex. La orden stop consiste en programar una operación que se ejecutará una vez el precio avance un poco más en la dirección que deseamos entrar. Es decir, se trata de una orden de compra que colocamos por encima del precio actual del mercado, o una orden de venta que está por debajo del precio vigente.
En el caso de las órdenes limitadas, consisten precisamente en intentar entrar en la dirección del mercado pero a un precio mejor del que actualmente está cotizando. Es decir, queremos entrar un precio de compra inferior al precio actual del mercado o a un precio de venta por encima del precio actual.
Stop Loss y Take Profit
A la hora de programar una operación en Forex tendremos la posibilidad de automáticamente asociarle una orden de Stop Loss y una orden de Take Profit.
La orden de Stop Loss consiste en una orden que se introduce a la distancia que decidamos del precio de entrada precisamente para limitar las posibles pérdidas de esa operación si el precio va en nuestra contra. Es decir, si compramos un par de divisas a una cotización de 1,2056, introduciríamos un stop loss en 1,2036 si queremos limitar la pérdida máxima de la operación a 20 pips.
La orden de Take Profit consiste en asegurar un nivel de beneficio determinado en base a la introducción de una orden de salida de la operación en el caso que la misma vaya a nuestro favor. Es decir, si nuestra estrategia en el ejemplo anterior es obtener un beneficio de 30 pips, colocaremos la orden de Take Profit en 1,2086.
Cuando se ejecuta la orden de Stop loss o de Take Profit, automáticamente se cancela la orden no ejecutada de ambas, no quedando órdenes pendientes de ejecutar.
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