Un pacto de no agresión con el que esquivar una guerra salarial que disparara los costes laborales. Es lo que hicieron algunos de los gigantes tecnológicos durante varios años. Ahora han llegado a un acuerdo con los trabajadores que los demandaron para indemnizarlos con una cantidad que supera los 400 millones de dólares.
La guerra por contratar los mejores ingenieros y programadores en Silicon Valley no es nueva. Pero fue entre 2005 y 2009 cuando, según la denuncia presentada en 2011 por un grupo de trabajadores, Apple, Google, Intel y Adobe decidieron pactar. Conspiraron para suscribir un pacto de no agresión. Una de las pruebas que se manejó fue el intercambio de correos entre Steve Jobs y el expresidente ejecutivo de Google Eric Schmidt.
Ahora, ese pacto para detener la guerra ha desembocado en una indemnización millonaria. En abril del año pasado, las cuatro firmas accedieron a pagar 324 millones de dólares al grupo de trabajadores para evitar el juicio. Sin embargo, recibieron una negativa por respuesta. Y tuvieron que incrementar la cifra hasta los 415 millones, que tendrá que ser ratificada por una jueza.
Las cifras de la 'guerra'
La guerra por los talentos en Silicon Valley lleva años desatada y ha hecho que los salarios registren récords año tras año. Un estudio del pasado año señalaba la escalada de sueldos en los desarrolladores de 'software' desde el pasado año 2009. Una escalada que, además, tiene en la compensación a través de acciones de las compañías otra de las formas de pago.
Un completo reportaje de The New Yorker, en el que explicaba el surgimiento de agentes que gestionan las contrataciones de algunos de estos trabajadores, advertían de que el salario promedio de un ingeniero es de 130.000 dólares al año. Y relataban un caso, cuando menos paradigmático: el vicepresidente de ingeniería de Twitter, Christopher Fry, recibió diez millones de dólares en 'stock options' de la empresa en 2012, colocándose en segundo lugar sólo por detrás del consejero delegado.
En El Blog Salmón | ¿Y si el talento estuviera sobrevalorado?, La historia de Silicon Valley Imagen | That Guy Who's Going Places