La industria cinematográfica no iba a pasar desapercibida en el proceso de recorte de los gastos públicos, en el día de ayer el Ministerio de Cultura ha decidido realizar las consultas necesarias para modificar la Ley 55/2007 de 28 de diciembre del Cine, con el objetivo de reducir los gastos en esta materia.
Con la legislación actualmente en vigor, una productora cinematográfica podía llegar a percibir hasta 2 millones de euros por película del erario público. Ahora, se reducirán un 50% todas las subvenciones que puede percibir una película, bajando el tope máximo de los 800.000 a los 400.000 euros. Esta medida, como indica el Director del Instituto de Cinematografía y Artes Visuales (ICCA), Ignasi Guardans, perjudicará a aquellas películas más taquilleras.
Además de lo anterior, y a iniciativa de la Unión Europea, las sociedades productoras de cine tendrán que pedir un 'Certificado de obra cultural', que tampoco será gratis, y sin lugar a dudas se convertirá en una condición sinecuanun para poder recibir las ayudas. La todavía presunta reducción de las ayudas públicas al séptimo arte, complican aún más la situación del sector, que además de padecer los efectos de la coyuntura recesiva, ha sufrido cambios de orden sociodemográfico como las descargas ilegales de largometrajes, reproducciones sin derechos de autor, etcétera.
Muchos pensamos que el cine es mucho más que un arte, y que además de promover el empleo y el entretenimiento, se convierte en una máquina de materializar sueños. Entiendo que estamos en crisis y todos, sin excepción, tenemos que arrimar el hombro. Pero, ¿creen ustedes que esta medida puede considerarse equitativa cuando la reducción que se perfila es general? A día de hoy, hay una mayoría de pequeñas productoras que hacen cine apenas cubriendo costes.
Vía | 20Minutos En El Blog Salmón | De la financiación del cine a la de RTVE Imagen | osinaref