El PP ha decidido recurrir los Presupuestos Generales del Estado de 2011 debido a que impone limitaciones a la capacidad de endeudamiento de los ayuntamientos, y según este partido, eso va en contra del principio de igualdad. Además, aseguran que no se endeudan porque sean unos "manirrotos", sino porque están asumiendo competencias que no les corresponden, muchas de ellas de índole social.
Para mí, ellos mismos se han contestado. Están asumiendo competencias que no les corresponden, y la solución no es más deuda, sino que dejen de asumirlas unilateralmente. Lo que han hecho muchos ayuntamientos es asumir gastos que no les corresponden a base de deuda y luego quejarse de que la financiación no es suficiente. Deben dejar de hacer estas cosas, porque es irresponsable.
Los ayuntamientos deben entender que el Estado tiene que afrontar un reto muy duro que es reducir su déficit precisamente para poder pagar lo que debemos y para que nos sigan prestando lo que hay que refinanciar. No se puede tener un agujero negro en la economía como son los ayuntamientos que gastan y gastan y luego piden y piden sin límite.
Un claro ejemplo es el Ayuntamiento de Madrid, que se metió en una obra que no le correspondía, como era la M30, a base de deuda. Dicha obra la asumieron porque era bonita, le iba a dar votos, pero no era responsable, y ahora no hacen más que quejarse de que el Estado les ahoga. Pues bien, todos estamos haciendo esfuerzos, ha habido aumento de impuestos, bajadas de sueldo, aumento del paro, reducciones de beneficios y pérdidas en empresas. No puede ser que los ayuntamientos sigan despilfarrando el dinero como si el Estado tuviera una máquina de imprimir dinero.
Esperemos que el Tribunal Constitucional determine que la capacidad de endeudamiento no va contra el principio de igualdad, ya que el Estado, que es quien recauda la mayor parte de los impuestos, debe ser capaz de regular el grado de endeudamiento público de las administraciones.
Vía | El Economista En El Blog Salmón | El Estado proporciona un balón de oxígeno al Ayuntamiento de Madrid Imagen | Malias