Parece que todos los meses venimos con la misma canción, pero la verdad es que es uno de los efectos más graves de la crisis que estamos viviendo en España. El desempleo aumenta y mucho. En un año el número de parados ha aumentado en un millón. Se dice pronto. Ya tenemos, oficialmente, más de tres millones de parados. Y la tendencia es tan imparable que ya se habla de que llegaremos a cuatro durante 2009.
Hay algunos que ven un atisbo de buenas noticias. El paro sigue aumentando a un ritmo muy fuerte, pero se ha ralentizado en los últimos meses. En octubre el paro subió en casi 200.000 personas. En noviembre en 170.000. Y en diciembre en 140.000. A mi no me parece una buena noticia, porque que el desempleo siga creciendo a un ritmo tan fuerte es muy peligroso.
También dice el Gobierno que los planes de reactivación de la economía se van a notar dentro de poco, generándose empleo. Espero que ese empleo generado con dinero público sea para infraestructuras que haga nuestra economía más competitiva, pero tengo mis dudas. Aún así espero que el Gobierno lleve razón y se frene la sangría de puestos de trabajo.
Otro dato curioso es que el paro está aumentando más fuertemente entre hombres que entre mujeres. La razón más evidente es la construcción, donde se está destruyendo mucho empleo y donde los hombres son más predominantes.
¿Hasta dónde llegaremos?