
2025 tiene un objetivo concreto: no defraudarnos. Apenas llevamos cuatro meses y ya hemos visto -y sufrido- casi de todo. ¿Lo último? La República Popular China recurriendo a las palabras del ex presidente de los EEUU Ronald Reagan en sus redes sociales, para defender el libre comercio. ¿Y qué tiene de reseñable esto? Absolutamente todo.
Reagan ha sido históricamente uno de los iconos del anticomunismo, gran defensor del capitalismo de manual y uno de los presidentes más patriotas de la historia de su país.
Ahora, la diplomacia china -en concreto el perfil en X de la Embajada de China en EEUU- lo ha `resucitado´ para criticar el proteccionismo del actual presidente, Donald Trump. Que con sus aranceles ha iniciado la mayor guerra comercial que se recuerda contra el gigante asiático.
Y lo ha hecho recurriendo a un discurso de Reagan en 1987. Un viaje de casi 40 años en la hemeroteca donde China defiende que las palabras del ex presidente cobran de nuevo vigencia tras las decisiones tomadas por la nueva administración Trump.
Ronald Reagan vs. #tariffs : 1987 speech finds new relevance in 2025pic.twitter.com/CuAMw1eQXN
— Chinese Embassy in US (@ChineseEmbinUS) April 7, 2025
Ya durante sus años de mandato – y tal y como se puede ver el video- Reagan criticó la imposición de aranceles, advirtiendo de su peligrosidad, de sus consecuentes represalias, del colapso de los mercados financieros y de cómo éstos pueden hacer que millones de personas pierdan sus empleos. Sobre todo, en EEUU. Lo hace, mencionando la Ley Smoot-Hawley de los años treinta, que parece escrita en pleno 2025.
El nuevo orden comercial mundial
La guerra comercial entre Estados Unidos y China ha alcanzado nuevos niveles. Trump ha anunciado un incremento adicional del 50% sobre las importaciones chinas, sumado al 34% anterior. Como era de esperar, Beijing ha contraatacado con medidas similares, elevando su carga arancelaria sobre productos estadounidenses.
En medio de este caos, la publicación del discurso de Reagan por parte de China se ha vuelto incluso viral en redes sociales convirtiéndose en memes, mofas y objetivo de cientos de mensajes entre el sarcasmo y la incredulidad. Un crossover que nadie vio venir por las antípodas de quien lo publica (China) y de quien lo protagoniza (EEUU).
La Embajada de China en EEUU tiró de ironía en X y Trump contraatacó cual celebrity aunque desde Truth Social, denunciando la manipulación de las palabras de Reagan por parte de China y volviendo a remarcar su mantra: todos los países han abusado de la economía de los Estados Unidos. Y que los aranceles son más importantes que nunca para equilibrar el tablero de juego comercial.
¿Libre comercio o libre reinterpretación del pasado?
Resulta cuanto menos llamativo que en 2025 el libre comercio siga siendo una bandera en disputa. Lo que hace cuatro décadas fue una defensa contundente del capitalismo global, hoy es una herramienta narrativa para denunciar las contradicciones de un modelo proteccionista que, irónicamente, también fue defendido por otros presidentes del mismo partido de Reagan.
Trump, por su parte, no parece inmutarse ante estas referencias históricas. Continúa con su ofensiva comercial y amenaza con cancelar cualquier negociación con Beijing si no se retiran las medidas de represalia.
Y en medio de este juego de tensiones, lo que verdad importa: los mercados también sienten el impacto, con el S&P 500 en zona bajista y advertencias de recesión por parte de los más importantes bancos estadounidenses. ¿Se le puede volver todo en contra a EEUU? Solo el tiempo y Trump, tienen la respuesta.
En realidad, es una guerra arancelaria global
Los efectos de este conflicto trascienden más allá de las fronteras de Estados Unidos y China. Las cadenas de suministro globales se van a ver, sí o sí, afectadas, las inversiones pueden ralentizarse y muchas empresas multinacionales ya están reconsiderando sus estrategias. ¿Se convertirá el libre comercio en una especie de reliquia ideológica que todos citan y que puede verse seriamente afectado en este 2025?
También es reseñable la postura de China, país comunista en ideología pero capitalista en la práctica, que en un intento por tranquilizar a los mercados, ha querido reforzar su imagen de defensor del multilateralismo.
La reciente reunión de Xi Jinping con directivos de Apple, Samsung, Tesla, Mercedes-Benz y otras empresas globales demuestra que Beijing quiere seguir siendo un actor atractivo para el dinero internacional, a pesar de la postura inamovible de Trump.
Y como espectadores, los ciudadanos del mundo que observan con incredulidad cómo se desarrolla este duelo de titanes y esperando que las decisiones de Trump, convertidas en bombas financieras, les afecte lo menos posible a corto, medio y largo plazo.
¿Se está fraguando un nuevo orden comercial mundial?El futuro es incierto, aunque en el pasado Reagan ya avisaba de lo que podía ocurrir si el libre comercio era amenazado.